viernes, 1 de enero de 2016
Efectos, contagio, ¡vivir la navidad!
Una simple guirnalda es lo suficiente para animar a los vecinos. Lo decimos porque, sin entrar en políticas vecinales, el anterior equipo de gobierno, quizás por su interés de vivir más intensamente la Navidad y por poner en valor el Casco Histórico de la ciudad, se volcó totalmente en unos para desfavorecer a otros. Quizás lo hicieran sin mala intención, no lo dudo, pero de ahí a que nos dejaran sin una simple luz en las calles…
Fíjate lo que hace una simple luz colgada en una farola a la entrada de un barrio. Da ilusión, las fuerzas de vida te lleva por tu cuerpo, el afán de solidaridad, los sentimientos ajenos y la solidaridad te lleva a vivir el barrio.
Simplemente una guirnalda hace que se extienda la Navidad a los barrios, lo que desde el mismo Ayuntamiento organiza en el centro (que dicho sea de paso, son unos elementos muy válidos para para la ciudad), hace que cuando por necesidades obvias tienes que desplazarte a tu diputación, barrio etc., en definitiva a tu vivienda habitual, los agentes vecinales, de alguna manera, seguimos pensando que es Navidad.
Desde los talleres y ocupacionales pasando por los juegos para los niños y niñas, decoración de fachadas, concursos de belenes en las casas, villancicos y los propios días dedicados a Papa Noël, Reyes Magos, conciertos navideños en la parroquia y un largo etcétera, es lo que intentamos seguir que el hilo de lo que nos encontramos en el centro de la ciudad no se rompa.
Decimos que nunca hemos despreciado lo que el anterior equipo de gobierno ha hecho en el centro, únicamente siempre veníamos demandando la falta de vista que se tenía con respecto a los barrios y diputaciones. Una simple luz a la entrada de los barrios ha hecho posible que los vecinos siguiéramos viviendo la Navidad.
Simplemente es de sentido común, no hace falta de ir a Cambridge para pensar que los vecinos que vivimos en la periferia también somos ciudadanos, que sentimos y padecemos al igual que los de primera, nos sentíamos marginados porque era un contraste de, estar en la vida con luz y alegría a pasar a la penumbra todo apagado sin animo alguno de seguir viviendo, aunque desde las asociaciones de vecinos estábamos convencidos en seguir haciendo lo posible para que las fachadas de las viviendas se vieran iluminadas.
Ahora sí, es una alegría ver como la Navidad se vive, todos vivimos la Navidad, hagamos que desde los barrios sepamos vivir en la calle, sentirnos vecinos, ser solidarios sobre todo en Navidad, mantengamos las calles limpias, hacer que el día a día en nuestro barrio sea como vivir en tu propia casa, mantener la alegría todo el año, creamos la Fe hacia cosas y personas a través de los movimientos vecinales, ayudemos entre todos a que la Navidad no sea para unos días, seamos capaces de sentir la Navidad durante todo el año, es solo cuestión de fe.
Cartagena, 22 de Diciembre de 2915
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario